Cada vez existe mayor conciencia acerca de los elementos que componen los productos para guaguas; en ese sentido, inclinarse a la adquisición de artículos eco-amigables, fabricados con materias primas naturales, exentos de toxinas contaminantes y tratados en procesos respetuosos con la biodiversidad es mucho más que una tendencia, es un auténtico estilo de vida.
Chupete de caucho. Elaborados con caucho natural extraído del árbol Hevea Brasiliensis, estos ejemplares no contienen colorantes artificiales, ablandadores, parabenos ni PVC. Además de ser biodegradables y amables con el medio ambiente, estos artículos poseen una textura blanda y elástica que proporciona al menor una sensación muy similar a la de succionar el pecho materno.
Peines eco-friendly. Los cepillos fabricados con madera de haya y pelo natural de cabra no solo otorgan un masaje suave y tranquilizador para la guagua, sino que también ayudan a eliminar la carga electrostática de su cabello y disminuir el efecto de la costra láctea.
Esponjas de mar. Estas son imprescindibles a la hora de brindar un buen baño al niño. Son perfectas para obtener una limpieza profunda, masajear la piel y estimular la circulación sanguínea. Suaves al tacto, las esponjas de mar acarician dócilmente la delicada piel de tu hijo.
Pantuflas de piel. Confeccionadas para abrigar con calor natural, las pantuflas de piel de oveja son termo reguladoras, de manera que mantienen la temperatura corporal del bebé, siendo más frescas en verano y cálidas en invierno. Al ser fabricadas con genuina lana de oveja, estas zapatillas tienen propiedades hipoalergénicas y antibacterianas. Diseñadas en modelos confortables y resistentes, cuentan con suelas de cuero antideslizante y son muy fáciles de lavar.
Juguetes a la antigua. Los tradicionales juguetes de madera vuelven a ser los favoritos de los más pequeños. Figuras de elefantes, osos, conejos y jirafas que se desplazan con ruedas y cuerdas de algodón, son fabricadas con distintas combinaciones de lenga, laurel y raulí, y recubiertas con componentes no tóxicos como cera de abeja y aceite de linaza prensado en frío.
Piluchos de algodón orgánico. A diferencia del algodón común, para cuyo cultivo se utilizan fertilizantes sintéticos y plaguicidas, el orgánico se consigue a partir de un proceso libre de pesticidas, herbicidas y químicos dañinos. Al no ser clorado, la tela queda libre de peróxido de hidrógeno, dixina y formaldehido. Por ello, los piluchos confeccionados con este tipo de tela evitan posibles irritaciones en la piel de la guagua y garantizan una óptima transpiración, siendo idóneos para ser usados en cualquier época del año.