Sabemos que el trasladarnos con niños de un lugar a otro no es tarea simple, especialmente cuando nuestros hijos son pequeños y sus tiempos de concentración se reducen a minutos. Para que tus vacaciones comiencen de la mejor manera, te entregamos una guía de ideas que esperamos te acompañen en esta travesía y que te lleven a destino en paz.
Bolsito de arte
Reutilizando el mismo organizador del clóset o del baño de los niños, puedes tener un excelente entretenimiento para el trayecto hacia tus vacaciones. En cada compartimento dispón distintos elementos que les permitan a tus hijos realizar manualidades como cuadernos, lápices, calcomanías, pegamento fácil de limpiar, pompones, limpia pipas, ojitos plásticos, impresiones con sus dibujos favoritos, etc. Lo ideal es que los niños no conozcan este bolsito previo al viaje, para que una vez en camino, lo vayan descubriendo y de esta forma tendrás más rato de concentración en esta actividad.
¡Vivan los puzzles!
Esta actividad se puede realizar en conjunto, ya que basta con llevar una bandeja amplia con borde (de lo contrario las piezas saldrán volando ante cualquier movimiento), en la que previamente hayas probado que caben armados los rompecabezas que llevarán para el camino. Incluso se puede utilizar un recipiente plástico, lo más plano posible y con tapa, puesto que éste te permite retomar la actividad cuantas veces quieras, reduciendo el riesgo de que se desarme lo avanzado.
Calcomanías de gel
De seguro ya las conoces, pues se han transformado en una decoración y elemento de seguridad muy útil para evitar que los pequeños choquen con las ventanas de la casa, pero dándole una onda infantil a tus espacios. Hablamos de las calcomanías de gel, las que se pueden comprar en librerías e incluso supermercados y que suelen ser temáticas por lo que opciones hay muchas. Elige las que creas que más puedan gustar a tus niños y entrégaselas una vez que ya estén instalados en el medio de transporte en el que pasarán la mayor parte del tiempo. Permíteles utilizar las ventanas para crear cuentos y desarrollar su imaginación.
Aprovechemos de aprender
Los momentos en familia pueden ser también una oportunidad de aprendizaje. Una excelente idea es enseñarles a amarrarse los cordones. ¿Cómo hacerlo? Recortar un trozo de goma eva que asimile la forma del zapato, hacerle los orificios correspondientes e imitar el amarre tradicional. Así ellos podrán ir jugando a hacer el nudo, guiados por los padres. Recuerda entregar material independiente para cada uno de tus hijos para evitar que se peleen por su turno.
Cajita de sorpresas
En una caja plástica que tenga diversos compartimentos, distribuye varios snacks que sean del gusto de tus hijos. Chocolates, galletas, frutos secos, cereales son excelentes alternativas. Ideal que cada niño cuente con una propia, de lo contrario se puede desatar una batalla campal. Como el azúcar de alguno de los productos que le incluyas puede activarlos, te recomendamos emplear este tip hacia el final de la travesía, cuando sepas que ya queda poco para bajar ya sea del auto, avión o bus en el que se estén trasladando.
Conociendo la ruta
A través de dibujos de las diversas señales del tránsito y de objetos que se pueden encontrar en el camino, se puede realizar una ficha para que tus hijos vayan marcando lo que ven en la ruta. Incluir imágenes de acuerdo al medio de transporte que utilizarán. A modo de ejemplo, quienes lo realicen en auto, pueden incorporar señales de tránsito, semáforos, grifos, policías, tipos de automóviles, animales, tiendas y paisajes, mientras que aquellos que lo hagan en avión, deberán optar por elementos que se puedan encontrar en la cabina como ventanas, cinturón de seguridad, maletas, niños y carritos de comida, entre otros.
Consejos para considerar (Recuadro aparte)
1.- Evita juegos que pongan a competir a tus hijos, pues este tipo de actividades suele terminar en pelea, lo que no contribuirá al ambiente de paz que queremos para comenzar tus vacaciones.
2.- Infaltable uno o varios CD’s con la música que más les guste y que sabes que conocen las letras. El viajar junto a elementos que les son familiares, les ayuda a bajar la ansiedad del trayecto y además es una excelente instancia para cantar en familia y disfrutar del camino.
3.- ¡Cargadores en ruta! No los puedes olvidar. Sabemos que el abuso de tecnología no es bueno, pero si medimos éste puede transformarse en un excelente aliado. Por ello, procura llevar contigo esos mágicos cables que les entregarán entretención segura a los pequeños viajeros.
4.- Comparte con tus hijos el plan de viaje. Es fundamental tener programadas las detenciones, idas al baño, tiempos de comida y de descanso. Si ellos conocen cuál será esta programación, te evitarás varios “¿Cuánto falta?” y los ayudarás nuevamente a mantener su ansiedad por llegar al lugar de destino bajo control.
5.- Ojo papás, el reducir el estrés que puede provocar un viaje en los adultos no es un tema menor. Procuren llevar a mano todo lo necesario para resolver alguna emergencia como: pañuelitos secos y húmedos, agua, pañales, productos de limpieza en caso de que alguno de tus hijos sufra de mareo y alimentos, en especial si el trayecto es desconocido y no se está seguro de contar con un lugar apropiado para comer. Hay que recordar que los menores son muy perceptivos y que nuestra ansiedad o nerviosísimo podría traspasarse a ellos.