Tenemos más que claro que la lectura tiene muchísimos beneficios para nuestros niños. Crear hábitos desde pequeños hace que crezcan con un gusto por la lectura adquirido de manera natural y no impuesta. El fomento lector es clave desde que son bebés recién nacidos.
Bueno, así como nos esforzamos por fomentar que nuestros niños lean, a veces cometemos errores que van alejando a los pequeños de la lectura, y nuestras estrategias de fomento lector van quedando en la nada.
¿Cuáles son los errores de fomento lector que alejan a nuestros niños de la lectura?
Obligarlos a leer
Cambiar otras aficiones que les gusta por la lectura. No nos equivoquemos. La lectura debe encontrar su tiempo tranquilo y por gusto dentro de la rutina diaria. No debemos presentarla como una “tarea escolar obligatoria”.
Imponer lecturas que nos gustan a nosotros sin tomar en cuenta los gustos de los niños
Todo lo que lean es un aporte, así que no los consideremos “poco útiles”.
Tener siempre en cuenta la edad y la maduración de tus niños
Dependiendo de esos factores, sentirán mayor gusto por ciertas historias o cuentos más sencillos o complejos.
No te empeñes en excluir la tecnología frente a la lectura
Con eso sólo lograrás alejarlos. Compatibiliza ambas, hoy existen excelentes Apps con cuentos o de lectura que los ayudarán de manera entretenida.
No dejes de compartir la lectura con ellos
No les digas “estoy cansada”; “no tengo tiempo”; “más tarde si alcanzo, leemos un rato”. Intenta darte el tiempo de leer con ellos. Además verás que es una excelente instancia para desconectarte del mundo y conectarte con tus hijos.
Cuando te lean en voz alta, corrígeles sus errores lectores
Así podrás ir ayudándolos a que juntos vayan perfeccionando la lectura. Recuerda siempre hacerlo con mucho cariño y respeto, para que lo tomen de manera positiva.
Los padres cumplimos un rol fundamental en el fomento lector de nuestros hijos. Estos pequeños errores pueden causar ciertas frustraciones que hagan que nuestros hijos se vayan alejando de este hábito que es fundamental para toda la vida.
Hay varios errores comunes que los padres pueden cometer y que podrían alejar a sus hijos de la lectura. Aquí algunos de ellos:
- Imponer la lectura como una tarea: Si los padres convierten la lectura en una obligación o en algo negativo al asociarla únicamente con las tareas escolares, los niños pueden desarrollar una aversión hacia ella.
- Falta de modelado: Los padres que no leen o que no muestran interés por la lectura pueden enviar un mensaje implícito de que no es una actividad importante o valiosa.
- No proporcionar acceso a libros interesantes: Si no hay una variedad de libros interesantes y apropiados para la edad de los niños disponibles en el hogar, es menos probable que se sientan motivados para leer.
- No dedicar tiempo para leer juntos: La lectura compartida es una excelente manera de fomentar el amor por la lectura desde una edad temprana. Si los padres no dedican tiempo para leer con sus hijos, están perdiendo una oportunidad importante para cultivar ese hábito.
- Falta de apoyo y estímulo: Si los padres no muestran entusiasmo o no elogian los esfuerzos de sus hijos cuando leen, estos pueden perder la motivación para seguir haciéndolo.
- Criticar la elección de lectura de los niños: Es importante permitir que los niños elijan libros que les interesen y que estén en su nivel de comprensión. Criticar sus elecciones puede desanimarlos y hacer que eviten la lectura.
- Sobrecargar de actividades extracurriculares: Cuando los niños tienen horarios sobrecargados de actividades extracurriculares, es posible que no tengan tiempo ni energía para dedicarse a la lectura de manera regular.
- No ajustarse a los intereses individuales de los niños: Cada niño es único, y lo que funciona para motivar a un niño a leer puede no funcionar para otro. Es importante adaptarse a los intereses individuales de cada niño para fomentar su amor por la lectura.
Al evitar estos errores y fomentar un ambiente en el que la lectura se considere una actividad placentera y valiosa, los padres pueden ayudar a sus hijos a desarrollar un hábito de lectura saludable y duradero.