Una de las primeras medidas que tiene que tomar una pareja que se ha propuesto ser padres, es examinar el calendario de ovulación de la futura mamá para calcular su ciclo fértil.
Según Francisca Astete, matrona de la Clínica Las Condes, la ovulación es básicamente la liberación de un óvulo desde el ovario, proceso que generalmente se produce una vez por período menstrual. Sin embargo, el ginecólogo de la Clínica Santa María, Jaime Prado, agrega que desde los 30 años, tan solo 1 de cada 4 mujeres que intenta embarazarse cada mes lo logra.
Si bien la ovulación se puede producir entre el día 11 y 17 de tu ciclo si tienes un período regular, no es así en todas las mujeres, explica Francisca Astete, ya que hay muchas que presentan desórdenes en su ciclo menstrual o en la ovulación. Así, es posible presentar períodos más cortos o largos e, inclusive, doble ovulación en un período.
Jaime Prado acota que, incluso, puede haber una falta de ella hasta de dos ciclos por año y sigue siendo normal; no obstante, si no hay regla cada dos meses o más, es probable que no estés ovulando.
Tener conocimiento de tu ciclo menstrual, te ayudará a saber cuál es tu día más fértil. Además, si lo calculas desde el primer día de menstruación, puedes establecer la prolongación de cada ciclo.
El ginecólogo explica que la ovulación ocurre más o menos 14 días antes del fin del ciclo. Si el tuyo es de entre 26 y 30 días, una buena medida es ajustar las relaciones sexuales desde la décima jornada, teniendo encuentros día por medio durante 5 días.
Indicadores caseros para la ovulación:
- La variación en la viscosidad del moco cervical.
- Mayor humedad vaginal.
- Aumento del deseo sexual.
- Dolores similares al “dolores de ovarios”.
- Hinchazón abdominal.
- Aparatos que indican que estás ovulando, según tus secreciones.
¿Cómo calcularlo?
- Hacer un seguimiento mediante ecografías seriadas.
- Realizar un test de orina para medir el momento de la ovulación.
- Medir la progesterona en la sangre durante la segunda mitad del ciclo menstrual.
- Tomarte la temperatura a diario.
- Hacer un seguimiento folicular.
- Medir el LH en orina o saliva.
- Medir las hormonas de sangre.